Las asociaciones que suscribieron este acuerdo, que representan a entidades tanto de ámbito estatal como autonómico acordaron, ayer por la tarde, en la sede de Greenpeace en Madrid, adoptar una postura común ante el problema de los residuos radioactivos y de la energía nuclear en generl.

Según el comunicado "estas asociaciones se opondrán activamente a cualquier tipo de cementerio nuclear o almacenamiento de residuos radioactivos mientras no cese la producción de los mismos en las centrales nucleares. Consideran que el primer paso a dar por el Gobierno debería ser un plan urgente de cierre de las centrales nucleares".

Además, estas organizaciones se oponen a cualquier posible plan de Enresa de construir un almacén temporal centralizado (ATC) y/o laboratorios radioactivos en prfundidad porque consideran que ambos tipos de instalación serían la antesala del cementerio nuclear definitivo.