A juicio de la ONG, los datos de este estudio ponen de manifiesto la necesidad de implantar un nuevo modelo de gestión en el que la prioridad sea la recogida selectiva de la fracción orgánica y la prevención y reducción de los vertidos.

El documento, titulado "La situacion de las basuras en España", recoge los últimos datos actualizados por el Ministerio de Medio Ambiente sobre la generación de residuos referida al año 2003. En él se constata un crecimiento total de residuos urbanos en España del 40%, un aumento que no puede justificarse por el mayor número de población.

En este sentido, el informe también recoge un aumento cercano al 30% cuando se analizan los datos per cápita. Así, en España se ha pasado de generar 1,06 kilogramos diarios de basura por habitante a 1,38.

Un problema añadido a la actual situación es el incremento de la incineración vista como una alternativa que otorga más beneficios económicos que medioambientales y que, según Greenpeace, bloquea que se consiga avanzar en prevención.

El estudio analiza la composición de las basuras en España y confirma que cerca del 48,9% de los residuos son materia orgánica. Un 18,5% es papel, el 11,7 plástico y el 7,6 vidrio. "Todo ello", advierte Sara del Río, responsable de la campaña de Tóxicos de Greenpeace, "susceptible de ser aprovechado".

La realidad del tratamiento de los residuos, añadió Del Río, es que al final sólo se recuperan un 11,52% de los residuos, el 88% restante es eliminado. Por ello, subrayó que lo correcto sería optar por priorizar la fracción que es más fácilmente aprovechable, que es la materia orgánica. También por hacer más eficiente el reciclaje de envases, vidrios y papel.

Con este panorama el director ejecutivo de Greenpeace en España, Juan López de Uralde, aseveró que España no alcanzará los objetivos de reducción de basuras fijados en el Plan Nacional para el periodo 2000-2006.

"Hay que ir mucho más allá en la gestión de la basuras y exigir un plan más exigente basado en el modelo de 'residuo cero'". "El sistema de recogida ha fracasado o se muestra insuficiente", insistió López de Uralde.

Por comunidades autónomas, el informe revela grandes diferencias en el tratamiento de los residuos, si bien la tónica general es que la información no es la correcta y que los datos no son comparables por falta de una metodología homogénea.

Aun así, destaca Baleares como la comunidad con las cifras más altas de residuos generados por cada habitante, con 2,04 kilos al día. En el otro extremo se situaría Galicia, con 0,91 por habitante y día.