La organización ecologista ha hecho un llamamiento a diferentes gobiernos para que exijan a los japoneses que cancelen su programa de capturas en la Antártida, previsto en 440 ballenas este año, frente a las 339 del año pasado.

"Es una vergüenza que a finales de milenio se siga permitiendo esta actitud de los barcos balleneros japoneses", declaró Xavier Pastor, director Ejecutivo de Greenpeace España. "Los gobiernos del mndo deben dejar claro a Japón que no puede pisotear de esta manera los acuerdos internacionales".

El Santuario Ballenero de la Antártida fue establecido en 1994 por decisión de la CBI, organismo internacional que se encarga también de la conservación y gestión de las poblaciones de otras especies de ballenas en el mundo. Sin embargo, los japoneses, bajo el pretexto de realizar una "caza científica", han continuado capturando ballenas en este área.

La "caza científica" es, según Greenpeace, un intnto de reabrir la caza comercial a gran escala. Fuentes de la industria japonesa citadas por la organización ecologista han confirmado que uno de los propósitos de esta "investigación" es entrenar a las tripulaciones que serán necesarias cuando se reabra la caza comercial.