GREENPEACE DENUNCIA QUE CARTAGENA SERA UN "BASURERO INDUSTRIAL"
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La organización ecologista internacional Greenpeace y la asociación ecologista murciana ANSE, denunciaron hoy, en una rueda de prensa convocada a bordo del buque "Rainbow Warrior", el proyecto de diversas empresas de covertir Cartagena en un basurero para residuos tóxicos industriales.
La crisis industrial que sufre Cartagena está siendo aprovechada por esas empresas para promover sus proyectos contaminantes, según los ecologistas.
El buque insignia de Greenpeace,"Rainbow Warrior", llegó ayer a Cartagena para cubrir una nueva etapa de su campaña en defensa de los recursos naturales del Mediterraneo.
Entre los proyectos de plantas de tratamiento de residuos proyectados en Cartagena, los ecologistas destacarn el del consorcio formado por la empresa pública Minas de Almadén y la multinacional Waste Management.
Ambas empresas son conocidas internacionalmente, según los denunciantes, por sus múltiples agresiones al medio ambiente. Su objetivo es construir una planta incineradora en Cartagena con capacidad para quemar 45.000 toneladas/año de basura tóxica.
El proyecto iba a construirse en la localidad de Almadén (Ciudad Real) pero fue rechazado por el Gobierno de Castilla-La Mancha por la "inviabilidad mbiental de proyecto".
Según datos del Ministerio de Obras Públicas, la región de Murcia genera anualmente 5.000 toneladas de residuos considerados "incinerables". Sólo la planta de Minas de Almadén tendría una capacidad casi diez veces mayor de tratamiento de residuos que la propia producción de residuos en Murcia.
Otras empresas, como TCPA, THERMOEL o Interasset Management, han presentado también sus proyectos de plantas para residuos que se sumaría a los ya mencionados y al de la multinacionalGeneral Electric Plastics, que pretende construir otra incineradora con capacidad par a 26.000 toneladas/año.
Greenpeace ha denunciado que no se puede presentar como alternativa para la creación de empleo una planta de residuos tóxicos, ya que, además, generan muy pocos puesto de trabajo.
"La salida de la crisis a través de la conversión en un vertedero es imposible" ha declarado Juan López de Uralde, portavoz de Greenpeace.
"Ya hemos visto muchas veces", añadió, "cómo las empresas destruyenel medio ambiente y los recursos y luego se van a otro sitio dejando detrás desempleo y miseria".
"Para mantener todas esta plantas funcionando, se importarán residuos de todo el mundo. Cartagena se va a convertir en un basurero industrial", concluyó.
(SERVIMEDIA)
26 Ago 1993
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