Greenpeace ha manifestado su total rechazo a los nuevos nombramientos por considerara que "éstos no espetan en absoluto los criterios de imparcialidad e independencia que deben ser exigidas a un organismo de la índole del CSN".

Para Greenpeace, los nuevos consejeros (Juan Manuel Kindelán, Anibal Martín y Agustín Alonso), "son personas cuya trayectoria profesional se ha destacado por su estrecha vinculación con la industria nuclear y por su marcado carácter pronuclear".

Los nuevos consejeros son: Juan Manuel Kindelán, hasta ahora presidente de la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos Enresa, ue sustituye al actual presidente del CSN, Donato Fuejo; Anibal Martín, gerente de la central nuclear de Valdecaballeros, y Agustín Alonso, catedrático de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Indsutriales de la Universidad Politécnica de Madrid, y miembro del Forúm Atómico Español, institución cuya única misión es promover la energía nuclear.

"El nombramiento de estas personas", según Carlos Bravo, portavoz de Greenpeace, "es otra muestra más de que el CSN está en manos de la industria nuclear, l cual ha demostrado en repetidas ocasiones que su única prioridad es proteger sus propios intereses económicos, aunque esto sea a costa de la seguridad del medio ambiente y de la salud de los ciudadanos".

Para Greenpeace, "cualquier cargo en el Consejo de Seguridad Nuclear requiere como mínimo el ser valedor de una absoluta imparcialidad en cuanto al posicionamiento sobre la conveniencia o inconveniencia de la energía nuclear y poseer una probada amplitud de miras y capacidad de comunciación y diálogocon las organizaciones sociales preocupadas por el medio ambiente. Estos requisitos han sido ignorados por completo".

En opinión de la Asociación Ecologista de Defensa de la Naturaleza (Aedenat), "los consejeros elegidos disminuyen la transparencia del CSN y alejan a este organismo de mantener una imparcialidad completamente necesaria para la importacia de la misión que tiene encomendada".

Asimismo, señala Aedenat que "la descarada postura de los nuevos consejeros a favor del desarrollo de la enegía nuclear, y con ello de la defensa de los intereses particulares y privados de las compañias eléctricas propietarias de las centrales nucleares frente a los del conjunto de la sociedad".