Según explicó a Servimedia el responsable de la Campaña de Agua de Greenpeace, Julio Barea, el precio del agua por metro cúbico no alcanza el euro de media, tres veces menos de lo que cuesta en un país como Alemania.

"Consumimos mucho, demasiado y muy barato, y además la deperdiciamos en plan salvaje sin darnos cuenta de que es un elemento muy escaso", aseveró Barea.

Cuando a estos datos se suma una sequía extrema como la que se está registrando en España, la situación se convierte en preocupante, reconoció Barea, quien reclamó al Gobierno medidas urgentes de ahorro de agua.

En España, sólo en abastecimientos urbanos se pierde más de un 30% de agua por culpa de la conducciones, "algo que no se debería permitir", aseveró Barea. "Antes de hacer trasvases, desaladoras o mil cosas más, habría que acometer los ahorros de agua que se pueden hacer fácilmente".

"Hay que ser conscientes de lo que estamos gastando y de que sin agua no podemos vivir. El agua es la que hay y hay que consumirla de forma eficiente y estamos consumiendo por encima de nuestras posibilidades", concluyó.