Los manifestantes, la mayor parte de lo cuales llevaban los rostros tapados con pañuelos, bufandas o pasamontañas, marcharon desde la barriada de Santa Marina, en las afueras de la ciudad, hacia el centro urbano, donde atacaron a los policías con piedras y toda clase de objetos contundentes, incluido el lanzamiento de cohetes disparos desde tubos metálidos, a guisa de improvisados morteros caseros.

Los choques violentos, con numerosas cargas policiales y las correspondientes respuestas de los trabajadres, provocaron importantes atascos y retenciones del tráfico rodado en toda la zona.

Otros grupos de trabajadores cortaron, asimismo, el tráfico de automóviles en Figaredo y en algunas carreteras comarcales, también por medio de actitudes violentas.

Entre los incidentes mas destacables, figura igualmente el protagonizado por doce trabajadores que permanecieron retenidos durante seis horas en el pozo Santa Bárbara de Hunosa, después de que a primeras horas de esta mañana, un piquete colocara hieros en las dos jaulas en las que viajaban, lo que les impedía salir al exterior.

Los afectados fueron once vigilantes y un bombero, que realizaban trabajos de mantenimiento en el interior de la instalación minera.