Olivares insistió en que algunas fuentes policiales apuntan que los GRAPO han podido liberar a Cordón y que éste puiera estar en un país del continente americano, aunque subrayó que él es más partidario de creer en la palabra de la familia.

Tras señalar que la policía no tiene constancia de que se haya pagado un rescate y que no hay pistas fiables sobre su paradero, Olivares se mostró comprensivo con la familia y reconoció que cuando se produce un secuestro el objetivo prioritario es la liberación de la víctima.

Igualmente, negó que la operación desarrollada ayer contra los GRAPO en Barcelona, Valencia y Cádi haya puesto en peligro la vida del secuestrado.

El director general de la Policía señáló que Fernando Silva Sande, líder de los GRAPO que todavía no ha sido arrestado, podría estar vigilando a Publio Cordón, según se desprende de las declaraciones de Enrique Cuadra Echeandía y de su compañera, Concepción González, dos de los máximos responsables de la banda terrorista que ayer fueron detenidos junto a otras trece personas.

Por otra parte, Olivares rechazó categóricamente la información publicadahoy en varios periódicos, según la cual el Ministerio del Interior no informó al juez Baltasar Garzón de que los narcotraficantes gallegos pretendían atentar contra él.

En este sentido, subrayó que el Cuerpo Nacional de Policía no ha conocido ningún plan sobre la posibilidad de que el verano pasado se pudiera cometer un atentado contra el chalet de Galicia en el que pasa sus vacaciones el magistrado.

Olivares insistió en que de conocerlo la policía hubiera tomado las correspondientes medidas prevntivas y hubiera informado a Garzón.