En la actualidad, siete comunidades mantienen moratorias a la apertura de grandes centros comerciales e hipermercados, a lo que se suman las restricciones, en forma de prohibición o de obligación de solicitar licencia autonómica, además de la municipal, a supermercados a partir de 400, 500 ó 600 metros cuadrados por parte de algunas comunidades autónomas, según los casos.

Así, el País Vasco obliga a solicitar licencia a los supermercados de más de 400 metros que pertenezcan a cadenas de distribución; Castilla y León, de 500 metros, y Murcia, de 600 metros.

Además, Castilla y León y Murcia han creado licencias para tiendas descuento (Plus, Dia, Lidl, Aldi) de más de 300 y 400 metros cuadrados, respectivamente.

Según señalaron hoy a Servimedia fuentes de Anged, "creemos que el comercio minorista en España debe adaptarse a las tendencias liberalizadoras que en estos momentos marca la Unión Europea, según viene definido en la Directiva de Servicios actualmente en trámite de aprobación".

En opinión de Anged, "son los compradores quienes deben poder decidir entre cualquier tipo de formato comercial cuál es el que prefieren. A ellos corresponde elegir entre pequeños, medianos o grandes, y sólo podrán hacerlo si tienen toda la oferta a su alcance".

"Por el contrario, cuando se regula hasta el mínimo detalle qué operadores pueden entrar al mercado, cómo y dónde, se está limitando la libertad de elección del consumidor, seatenta contra sus derechos, se distorsiona la competencia y se impide que las empresas puedan mejorar su productividad", indicaron las grandes superficies.

Las mencionadas fuentes concluyeron que "en ANGED siempre nos hemos manifestado en este sentido y seguimos siendo partidarios de la libertad de establecimiento, por supuesto, también para nuestros competidores".