De Grandes atribuyó a esta circunstancia el bajo pulso de la Cámara en los primeros meses de la legislatura y rechazó las acusaciones socialistas de que son el Gobierno y el PP los que esán obstaculizando las tareas parlamentarias.

"No puedo callar ante las reiteradas acusaciones del PSOE, que debió a ser más prudente", puesto que el PP y el Gobierno "han sido escrupulosos y comprensivos con el proceso interno del Partido Socialista, que ha sufrido muchos altibajos, ha tenido cambios de liderazgo, ha tenido gestoras y ha hecho una expresa dejación de sus obligaciones políticas", aseguró.

Según el portavoz popular, su grupo "ha comprendido" las circunstancias "excepcionales" del POE y la situación de provisionalidad en la que ha trabajado la dirección del Grupo Parlamentario Socialista hasta la celebración del 35 Congreso socialista.

Incluso, aseguró, ha disculpado la presentación por parte de los socialistas de un paquete de medidas que "olían a naftalina" y que procedían de inciativas ya debatidas y desechadas en la pasada legislatura.

Para Luis de Grandes, lo inaceptable es que el PSOE trate ahora de atribuir al Gobierno su actitud de "manifiesta negligencia" porque es"notoriamente injusto".

"El Grupo Socialista", continuó el portavoz del PP, "tiene una manifiesta incapacidad de construir discursos de fondo con posiciones alternativas a las de nuestro Gobierno y para distraer la atención sobre esa incapacidad hace discursos sobre supuesta quiebra de las formas".

De Garandes aseguró que el Ejecutivo del PP no tiene ninguna intención de "dilatar ni entorpecer" la tarea de control que corresporde a la oposición, y tiene "una disponibilidad absoluta" a ajustaraseesa tarea.