GRAN EMOCION EN LOS MONTAÑEROS CIEGOS TRAS CULMINAR EL ACONCAGUA PESE AL VIENTO Y EL FRIO

MADRID
SERVIMEDIA

Serafín Zubiri, Alfonso Fidalgo y Javier Sáinz de Murieta han cubierto una página importante en la historia de los atletas ciegos tras culminar el Aconcagua (6.959 metros), pese al viento y el frio que acompañó el ataque final a la cumbre del pico argentino en la tarde del pasado sábado.

Según informaron a Servimedia fuentes de la expedición, los tres atletas ciegos junto a los cuatro guías encabezados por el montañero Mari Abrego y el médico del equipo culminaron la cima en un solo grupo, por la car norte, a las 4 de la tarde (8 de la tarde hora peninsular española).

Esta mañana está prevista la llegada de los expedicionarios a la localidad argentina de Mendoza, tras dejar el último campamento base en la cordillera andina y para preparar su regreso a España.

El grupo se encontró varias horas antes de llegar a la cima "con buen tiempo, soleado, pero acusado viento frío que frenaba la ascensión", explicaron fuentes de la organización, que añadieron que tras coronar el pico, los componentes de grupo "estuvieron una hora en la cumbre muy emocionados, llorando y cantando".

Fuentes de la Organización Nacional de Ciegos (ONCE), patrocinadora de la expedición, calificaron la "coronada" de "éxito terrible y gran proeza para los atletas ciegos".

"LA EMOCION LES CALENTO"

Tras permanecer en la cumbre por una hora, los ocho miembros de la expedición comenzaron el descenso hasta el campamento 2 (a 5.900 metros) donde pasaron la noche en condiciones "precarias".

Según el portavoz de la orgnización consultado, el viento frío y las malas condiciones en las que encontraron el asentamiento les dejó descansar apenas unas horas. "Sin embargo, la emoción les calentó", señaló.

Tras un breve descanso ayer, domingo, bajaron al campamento base, en la denominada Plaza de las Mulas, a 4.200 metros de altitud, desde donde han partido esta mañana de regreso a la localidad de Mendoza.

La expedición "Aconcagua 94", como fue bautizada, partió hacia Argentina el pasado 27 de diciembre. Los tres atleas se habían preparado para esta aventura desde mayo, aunque la idea parte de tres años atrás, cuando Zubiri le propone un proyecto de montañismo para ciegos en el Aconcagua a Mari Abrego, jefe de esta expedición.

Mari Abrego estudió con Zubiri las posibilidades de éxito y se realizó un selección entre atletas ciegos, tras un regreso de Abrego del Aconcagua (cuya cumbre que ha culminado ya en una veintena de ocasiones).

Los seleccionados fueron el propio Serafín Zubiri, navarro, 29 años, campeón e la ONCE en 800 y 1.500 metros; Alfonso Fidalgo, leonés, de 24 años, oro paraolímpico en lanzamiento de peso y de disco en Barcelona, y Javier Sáinz de Murieta, zaragozano de 36, subcampeón del mundo de judo y cuarto en esta disciplina en los paraolímpicos de la Ciudad Condal.

Por otra parte, segun informaron fuentes de la expedición, unos setenta montañeros han intentado culminar el Aconcagua en la misma semana que la expedición ONCE. Como en todo deporte que comporta riesgo, la desgracia acompañó auna montañera alemana que falleció la pasada semana cuando intentaba la ascensión junto a otras dos personas.

(SERVIMEDIA)
17 Ene 1994
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