En una entrevista que publica hoy "La Vanguardia", González no se muestra partidario de que Alfonso Guerra encabece una tendencia dentro del PSOE y por eso dice que él, como secretario general del PSOE, nunca va a promover algo así. No obstante, subraya que si el vicesecretario geneal tuviese esa intención, "sería más claro".

Para el jefe del Ejecutivo, no resulta llamativo que el guerrismo no se haya articulado como alternativa, porque esa alternativa como tal no existe.

"No hay una alternativa. Hay una Izquierda Socialista, pero tiene un peso reducido en el partido. El debate interno tiene otras connotaciones que superaremos, pero que no son las propias de un juego de alternativas, que sería más clarificador".

El líder del PSOE minimiza el conflicto que vive el partio en Andalucía y dice que contenciosos de estas características nunca enturbiarán el proyecto de gobierno del partido.

"Independientemente de los problemas que haya, creo que relativamente menores, dentro del PSOE hay algo que siempre ha funcionado y va a funcionar: un apoyo firme a todas las decisiones que el Gobierno adopta", indica González.

A su juicio, se está concediendo demasiada importancia a la discusión interna que vive ahora el socialismo andaluz, ya que, en su opinión, tiene poca trasendencia para el contenido del proyecto político que representa el PSOE.

En la entrevista, González dice que va a intentar mantener un encuentro con José María Aznar en cuanto le sea posible, y explica que no ha podido celebrarse aún esta reunión porque ha tenido un calendario muy apretado en las últimas semanas.

Tras insistir en que quiere mantener un diálogo permanente con el presidente del PP "incluso en momentos de gran dificultad", el jefe del Gobierno se congratula del buen clima de entendiiento que ha ha habido con el PP en el Senado durante el debate autonómico.

Sobre su colaboración con CiU, se muestra satisfecho de que tanto esta formación como el PSOE puedan estar llevando adelante sus programas electorales pese a sus acuerdos presupuestarios.

González asegura que su relación personal con Jordi Pujol "ha mejorado mucho" en los últimos tiempos y se muestra confiado en que el mecanismo de colaboración puntual en el Parlamento entre CiU y el PSOE puede durar toda la legislatura. En relación con las recientes declaraciones contra la Constitución hechas por el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, el presidente dice que le dejan "incomodísimo".

Al ser preguntado por unas declaraciones de días atrás del ex secretario general de UGT Nicolás Redondo, en las que lamentaba haber apoyado a González como líder del PSOE, el presidente del Gobierno responde: "Nunca me lamento de haberle apoyado. Y él sabe hasta qué punto le he apoyado en algunos momentos decisivos".