Gómez Navarro indicó que en el caso de que no prospere una autorregulación del sector, deberá ser el Ejecutivo el encagado de fijar las condiciones.

El ministro hizo estas declaraciones en Lérida, donde mantuvo una reunión con el grupo de empresarios que integran el Fórum 2000.

Reconoció que los consumidores necesitan cada vez más un horario más amplio, aunque precisó que es necesario evitar abusos por parte de las grandes superficies respecto al pequeño comercio.

En su opinión, sería positivo que el propio sector del comercio llegara a un acuerdo a través de un debate interno. En este sentido, dijo que el obierno hará todo lo posible para propiciarlo, pero en caso de que los comerciantes no resuelvan el problema, el Ejecutivo se replantearía hacerlo en respuesta a la ley presentada en el Congreso por el grupo de Convergència i Unió (CiU).

Asimismo, el ministro de Comercio y Turismo aludió a la necesidad de dar un trato específico a la pequeña y mediana empresa, a fin de permitir una mayor flexibilidad laboral.