Gómez Navarro, que hoy inauguró las obras de remodelación del Parador Nacional de Turismo de Gibralfaro, en Málaga, dijo en rueda e prensa que "nos preocupa enormemente que esto se pudiese generalizar y se produzca una auténtica campaña contra el sector", que de acarrear "efectos de importancia" podría alterar las excelentes previsiones para la industria hostelera en esta temporada.

El ministro señaló que desde el Gobierno se observaba las bombas de fin de semana con "preocupación" y aseguró que la elección de la comunidad catalana por la banda asesina ETA se debe a que "es la zona de moda por la apertura de Port Aventura, ya qu había crecido su oferta y su demanda".

No obstante, Gómez Navarro restó importancia a los artefactos colocados por ETA, asegurando que "hasta ahora son irrelevantes, sin trascendencia y sin efectos sobre nada". "Incluso", dijo el ministro, "la única contra un hotel fue desactivada a tiempo por el propio hotel, antes de que llegase el comunicado de ETA".

Para el titular de la cartera de Comercio y Turismo, el despliegue de la banda terrorista en la Costa Dorada "parece ser" que no implica "una grn infraestructura" operativa de ETA y el Gobierno no tiene indicios de una campaña generalizada contra los intereses turísticos españoles.

Sin embargo, recalcó que "la Policía está trabajando en todas las zonas turísticas y controlando, como todos los veranos, este tipo de acciones".