El organismo autonómico considera que este escrito invade las competencias que le son propias y señala, en una nota pública, que, "sin poner en duda el carácter válido del plan de emergencia remitido, estas actuaciones en nada favorecen la necesaria coordinación que debe presidir en todo momento las relaciones entre las administraciones central y autonómica".

"No obstante los procesos pendientes de transferencia", agrega, "resuta obvio que la Administración vasca debe configurarse en todo momento como interlocutor directo en todas la áreas relacionadas con el medio ambiente que supongan actuaciones concretas en el ámbito territorial de la comunidad autónoma".

"Es competencia de este departamento la planificación y programación de la política de gestión medioambiental, y en virtud de las competencias estatutarias corresponde al Gobierno vasco la ejecución de la legislación del Estado en materia de vertidos industriales y conaminantes en las aguas territoriales correspondientes al litoral vasco", concluye el comunicado.

El informe de la Delegación del Gobierno, destinado a los alcaldes de las localidades costeras, señala que "la experiencia acumulada como consecuencia del derrame de sólidos y líquidos hace necesario controlar los factores de tiempo y organización para garantizar el éxito en la lucha contra la contaminación".