Caffarel reafirmó hoy ante el Consejo de Administración del ente que no se rectificará el reportaje de "Informe Semanal" emitido el pasado día 14 sobre el desarrollo urbanístico en la Comunidad Valenciana, en contra de lo que exige el Gobierno autonómico de esta región.

La directora leyó un comunicado a los consejeros en el que, bajo el título "RTVE no admite censuras ni chantajes", se indica que, antes de admitir presiones políticas encaminadas a interferir la libertad de información en un medio de comunicación público, TVE está dispuesta a abandonar su actual sede en Valencia, que le cedió temporalmente mediante un convenio el Ejecutivo regional para un periodo de diez años.

La Generalitat había amenazado a TVE con la ruptura de ese convenio si no se emite la corrección que solicita. González Pons advirtió hoy que, si finalmente Caffarel cumple su amenaza, "debe mantener el 100% de la plantilla. Porque con afirmaciones como las que ha hecho, lo único que se pone de manifiesto son las ganas que tiene Televisión Española de abandonar su centro" en la región.

"No vamos a ser nosotros los que le pongamos pegas, y si TVE quiere marcharse que diga el día y la hora y que lo haga deprisa, porque nosotros tenemos necesidad de ese espacio para la televisión de los valencianos", manifestó hoy en Valencia el conseller autonómico.

Del mismo modo, González Pons tildó de "fascistoide" la respuesta de la responsable del ente, "porque nosotros hemos ejercido un derecho constitucional y legal, que es el derecho de rectificación, y lohemos hecho ante los tribunales de Justicia que es lo que puede hacer cualquier ciudadano".

Agregó que ejercer un derecho y pedir amparo en la Ley a través de los tribunales es "lo más normal del mundo y no hay que censurar ni coaccionar a nadie. Si TVE se da por aludida y amenaza con abandonar el centro, que lo hagan, nosotros no le vamos a insistir".