Así lo indicó la ministra, Raquel Sánchez, este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en la que detalló que una consecuencia derivada de esta medida es “aligerar la factura de los ciudadanos” pues el objetivo es lograr un ahorro de consumo de “como mínimo del 30%”, reduciéndose la factura “en un entorno similar”.

De los 1.889 millones de euros, 1.389 millones podrán traspasarse este 2022 a las comunidades y ciudades autónomas para financiar la rehabilitación y regeneración de viviendas, barrios y edificios residenciales, mientras que los 500 millones de euros restantes se traspasarán a partir del año 2023 para levantar viviendas en alquiler social.

“Esto no son gestos, son actuaciones de calado”, indicó Sánchez, que apuntó que los fondos se destinarán a actuaciones como “cambiar ventanas” o “dotar de calefacción que se alimente de energías renovables” a más de 200.000 viviendas de la “España interior”.

Asimismo, señaló que los fondos servirán para “revitalizar” el sector de la construcción, ya que se prevé crear en torno a 180.000 puestos de trabajo para autónomos y pymes, que son “las que fundamentalmente se dedican a realizar este tipo de actuaciones”.

La ministra apuntó que el reparto de los fondos se ha realizado con el acuerdo con las comunidades autónomas y anunció que se convocará una mesa sectorial en la que se acordará “definitivamente” la transferencia. Andalucía es la comunidad que más fondos recibirá, 328 millones de euros, seguida de Cataluña (304), Madrid (264), Comunidad Valenciana (204) y Galicia (110).

Este paquete de fondos se suma a las anteriores transferencias realizadas a las comunidades autónomas y ayuntamientos con los mismos objetivos y cuyo importe final se eleva a 3.540 millones de euros. La ministra detalló que esta cantidad supone un 75% de los fondos que se destinarán a la rehabilitación de viviendas y un 100% de la inversión en promover viviendas en alquiler social.