Esta ayuda la llevaron a cabo sobre el terreno, en las zonas más devastadas, tres organizaciones no gubernamentales: Fundación Cáritas para la Cooperación Internacional, Salvamento, Ayuda y Rescate Español (SARE) y la Fundación Plan Internacional España.

La distribución de estos fondos se realizó a través de cuatro convenios de colaboración suscritos por la Agencia Regional para la Inmigración y la Cooperación y estas ONG. Tres de ellos se suscribieron para atender las necesidades sanitarias, alimentarias y de saneamiento y abastecimiento de agua potable a las numerosas familias damnificadas por las precipitaciones torrenciales ocurridas en enero y febrero en 13 provincias de Ecuador.

El cuarto convenio tuvo como finalidad socorrer con ayuda alimentaria de emergencia a la población de los municipios de Puerto Cabezas y Raspan arrasados por el Huracán Félix, en la costa del Caribe de Nicaragua.

Así, la Agencia Regional para la Inmigración y la Cooperación aportó un total de 200.000 euros para que los voluntarios de Cáritas, SARE y Plan Internacional España atendieran a familias de las anegadas provincias ecuatorianas de Los Ríos, la zona más desvastada por las lluvias, El Oro, Guayas y Manabí.

En Nicaragua, en Puerto Cabeza y Raspan, la Agencia Regional para la Inmigración y la Cooperación destinó 50.000 euros para apoyar las actividades de emergencia, sobre todo alimentarias, que Cáritas desarrolló en un territorio sacudido por el huracán en el que vivían unas 47.000 personas en 52 comunidades.