Según confirmaron a Servimedia fuentes de la negociación, los sindicatos CCOO y UGT y las patronales empresariales CEOE y CEPYME se reunirán mañana con los representantes del ministerio en lo que será la primera reunión tras las dos semanas de "reflexión" que se iniciaron con la llegada del mes de octubre.

El objetivo del Gobierno es "desatascar" el proceso de diálogo social para la reforma laboral, que atraviesa por una etapa "espesa" según los sindicatos, que la semana pasada alertaron al Ejecutivo de que, de no presentar una propuesta esta misma, sería "muy difícil" conseguir un acuerdo.

El documento ha sido elaborado por los servicios técnicos de la Secretaría General de Empleo, que dirige Valeriano Gómez, pero bajo la mirada atenta del secretario de Estado de Economía, David Vegara.

El documento incluye un nuevo tratamiento de las bonificaciones para impulsar el empleo estable, aumentando, por ejemplo, de dos a cuatro años algunas ayudas para determinados colectivos, e incide en la necesidad de potenciar la Inspección de Trabajo para frenar la temporalidad (control del encadenamiento de contratos), la siniestralidad (más vigilancia) y la subcontratación.

Por otra parte, se habla también de una rebaja selectiva de cotizaciones, una vieja aspiración de la patronal, en la aportación que las empresas hacen al Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), que cuenta con una "hucha" acumulada del superávit de cotizaciones de los últimos años.

Sin embargo, el punto más polémico es el debate sobre la penalización por despido en los contratos indefinidos. El Gobierno se debate entre la extensión a todos los contratos de los 33 días de indemnización (tal y como quiere CEOE y propusieron los expertos al inicio del debate) o un modelo intermedio entre este contrato y el actual de 45 días de indemnización por año trabajado.

Los sindicatos rechazan que se toque la indemnización por despido y los empresarios se agarran a la necesidad de flexibilizar los modelos contractuales para dar más competitividad a la economía española.