Esta es la principal conclusión de la reunión mantenida esta tarde en Madrid por la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, y representantes de los pescadores afectados.

El secretario general de Pesca Marítima, Juan Carlos Martín Fragueiro, aseguró, en rueda de prensa, que los estudios están siendo realizados por el buque oceanográfico "Vizconde de Eza", al que se unirán varios barcos más en los próximos días.

Con el informe, que previsiblemente pondrá de manifiesto la falta de anchoa en el caladero cantábrico, se podrán solicitar ayudas para los afectados.

Mientras, el Gobierno español mantendrá más encuentros con las regiones y los pescadores afectados (principalmente de País Vasco y Cantabria), después de haber celebrado también reuniones con la Administración francesa, que comparte caladero.

Las partes también acordaron que la Administración española incremente los controles de entrada de anchoa, así como mejorar e impulsar el plan de gestión de la pesquería de la anchoa.