EL GOBIERNO PLANTEA LA REFORMA DE LAS PENSIONES DE VIUDEDAD Y ORFANDAD
- Pide a los grupos políticos que aborden la reforma en la Comisión Parlamentaria del Pacto de Toledo
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El secretario de Estado de Seguridad Social, Gerardo Camps, pidió hoy en el Parlamento que, dentro de la Comisión del Pacto de Toledo, se aborde la reforma de las pensiones de viudedad y orfandad para hacerlasmás fieles a la situación actual de ambos colectivos.
Camps compareció hoy ante la Comisión del Pacto de Toledo para explicar la posición del Gobierno al cumplirse cinco años de funcionamiento de este acuerdo, al que llegaron las fuerzas políticas con el objetivo de consolidar el sistema de Seguridad Social y garantizar y mejorar las pensiones.
Precisamente en la mejora de las pensiones, Camps aseguró que el Gobierno "no descarta" abordar una mejora de las prestaciones más bajas, especialment las de viudedad y orfandad.
Para el secretario de Estado de Seguridad Social, la incorporación masiva de la mujer al mercado de trabajo ha modificado las estructuras laborales y requiere una reflexión para adecuar las antiguas pensiones al momento actual.
"La incorporación de la mujer al trabajo nos tiene que llevar a una reflexión sobre lo que hoy es el concepto de viudedad y orfandad, entendiendo que la mujer en el trabajo nos puede hacer replantearnos los viejos conceptos del sistema de Sguridad Social", dijo.
Camps insistió así en el anuncio realizado el pasado día 8 de junio por el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, durante su comparecencia en el Senado, cuando abogó por "modular" las pensiones de viudedad y orfandad para que las más bajas mejoren su cuantía.
La pretensión del Ejecutivo es adecuar la pensión de viudedad a los ingresos de la unidad familiar, de manera que las viudas con pocos ingresos y cargas familiares puedan mejorar sus prestacines, en detrimento de aquéllas para las que esta pensión, de unas 40.000 pesetas mensuales, apenas significa una aportación en su economía.
En este mismo sentido, la reforma de la orfandad pasaría por ampliar la edad de sus perceptores, dado que las etapas formativas de los jóvenes son cada vez más largas. Actualmente, el límite para recibir esta prestación está en los 21 años si se es huérfano de uno de los padres y en 23 años si es de los dos, si bien los jóvenes estudiantes no se suelen incorpora al mercado laboral hasta los 25, como mínimo.
No obstante, Camps dejó muy claro que cualquier reforma que se aborde "respetará los derechos adquiridos" y tendrá que contar con un amplio consenso de los partidos políticos y de los agentes sociales.
"Se hace necesario continuar avanzando en el redimensionamiento de las políticas de protección social dirigidas al entorno familiar, otorgando una especial atención a sus componentes más débiles: personas viudas sin otras rentas o huérfanos", conclyó Camps.
(SERVIMEDIA)
28 Jun 2000
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