Según dijo el vicepresidente Mariano Rajoy en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ruptura de relaciones diplomáticas "no está planteada", ni el Ejecutivo español "desea hacer comentario alguno" sobre el particular.

Castro comparó a Aznar con "Franco cuando se estaba muriendo" y le insultó en varias ocasiones. Rajoy aseguró que "las declaraciones y las actuaciones de Castro se califican por si mismas y no meecen comentario adicional alguno".

El vicepresidente reiteró la "solidaridad" del Gobierno español con el pueblo cubano y recordó que las decisiones de esta naturaleza se adoptan "por consenso" en la UE.

En cuanto a las amenazas del presidente cubano, que prometió cerrar el Centro Cultural de España en La Habana, Rajoy dijo que el Gobierno no tomará ninguna medida frente a acontecimientos que, por el momento, no han sucedido.