"Mientras tenga órganos genitales masculinos debe permanecer en departamentos de hombres, porque lo contrario supondría un grave inconveniente para el normal funcionamiento de centro y sería muy perjudicial para la normal convivencia en un departamento de mujeres", argumenta Interior.

El Ejecutivo recuerda que el mandato legal por el que hombres y mujeres deben estar separados en los centros penitenciarios tiene contadas excepciones, como los módulos mixtos para las parejas con algún hijo menor de tres años.

"La Administración Penitenciaria no es ajena a la problemática que supone el ingreso en prisión de personas transexuales, ante la disyuntiva de su ubicación por e sexo biológico o por el sexo por el que desarrollan su vida. Esta Administración", prosigue el texto, "considera procedente que en el caso de los transexuales, cuando no existe una intervención quirúrgica, el sexo biológico determine la ubicación en el departamento que corresponda".

Por este motivo, se niega al interesado el traslado a un módulo de mujeres, si bien el Gobierno precisa que las normas del centro permiten "adoptar las medidas adecuadas para preservar su intimidad y, por supuesto, su intgridad física".