El Ejecutivo aprobó recientemente el plan de actividades de Cruz Roja para este año, que incluye el programa denominado "Vacaciones sin barreras", dirigido a personas mayores con carencias, con el objeto de fomentar la convivencia y beneficiar a las familias que tienen ancianos a su cargo.

Un total de 180 ancianos podrán disfrutar de unos días de descnso en verano e invierno en un albergue de la localidad navarra de Santesteban, con salidas a la playa y a la montaña.

La institución desarrolla también actividades de ocio y tiempo libre para minusválidos, como el programa "Transporte adaptado y asistido", que se dirige a personas con minusvalías físicas y psíquicas que no tienen otro medio para moverse desde sus domicilios.

Para ello, Cruz Roja dispone de tres vehículos con plataforma, rampas y conductores. Este servicio se presta a 20 personascada día, a 18 de forma semanal y a 10 quincenalmente.

Asimismo, Cruz Roja ha puesto en marcha una casa de acogida para enfermos de SIDA, destinada a ex drogadictos de ambos sexos de entre 20 y 35 años con escasas posibilidades de encajar en centros para enfermos crónicos o con pacientes de edades avanzadas.

Esta vivienda cuenta con todo tipo de equipamientos y personal de asistencia, que atiende a los siete seleccionados, todos ellos enfermos no terminales, aunque podrán permanecer en la misma csa cuando lleguen a esta fase de su enfermedad.

Entre los objetivos del programa está cubrir el vacío familiar y social, enseñar al enfermo a conocer su dolencia, avanzar en su integración y fomentar la solidaridad.

Otras actividades son las "Acampadas para menores", dirigidas a niños de 6 a 14 años procedentes de los pisos gestionados por el Gobierno navarro y diversas entidades sociales, y el programa de apoyo individualizado dirigido a personas que se encuentran en situaciones carenciales.

En virtud del convenio firmado el pasado mes de junio entre responsables de Cruz Roja y del Ejecutivo foral, la institución se compromete a proporcionar asistencia y transporte sanitario a todas las personas que requieran ser auxiliadas con carácter urgente tras sufrir cualquier tipo de accidente.

Cruz Roja cuenta con más de 10.000 socios en Navarra. El pasado año la institución ingresó 146,1 millones de pesetas, frente a unos gastos de 152,8 millones.