En una entrevista concedida a la revista "Epoca", el vicepresidente segundo del Gobierno afirma que uno de los riesgos de la economía española es que la inflación reste competitividd a las empresas.

Por ello, afirma que la lucha contra la inflación obligará a actuar de una forma "moderada" en las reformas impositivas, en el sentido de que "no parece necesario que sectores que están teniendo unos márgenes importantes de beneficios tengan que tener reducciones fiscales importantes".

El máximo responsable económico del Gobierno se refirió expresamente al Impuesto de Sociedades, del que dijo que tendrá que "atemperarse" en función de cómo evolucione la demanda empresarial y, sore todo, los márgenes de las empresas en los próximos meses.

Sin embargo, Rato precisó que el nuevo paquete normativo mantendrá las ventajas para las pymes, ya que se eliminará para ellas el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) y se impulsará su internacionalización.

Recuerda que, dado que el Gobierno no maneja la política monetaria, lo mejor que se puede hacer para controlar la espiral inflacionista es actuar sobre la política de ingresos. "Somos partidarios de una política de recaudaciónque nos permita equilibrar la economía", dijo.

Por ello, Rato insiste en que "hay que hacer coherentes las decisiones que tomemos sobre reducciones de impuestos a las empresas, con la inflación".

Durante la entrevista, el ministro de Economía aplaude el papel del diálogo social en las reformas del mercado de trabajo, pero advirtió de nuevo de que el Ejecutivo no puede dejar de tomar decisiones cuando los agentes sociales "no sean capaces o no quieran que se produzca la posibilidad de escribir un exto legal".