El principal escollo que tenía que superar el BBV para convertirse en el principal accionista de Probursa era la aprobación por parte del Gobierno mexicano de la asunción de la cartera de créditos, que suponía un 33% del activo total del banco.

Dicha cartera de créditos estaba valorada en 6.777 millones de pesos, de lo que hay que restar 1.277 millones en provisiones. Al final queda u saldo neto, que es lo que compra el Gobierno mexicano, equivalente a 4.900 millones de pesos, es decir, 102.900 millones de pesetas.

La operación se realiza de la siguiente forma: el Gobierno mexicano compra pagando con deuda oficial en bonos de aquel país la cartera de créditos, mientras que el BBV gestionará dicha cartera cobrando por ello las correspondientes comisiones.

Está previsto que la Junta ratifique también en la presidencia a José Madariaga Lomelín, en calidad de presidente no ejecutvo. El consejero y director general y primer ejecutivo de la entidad será el español Miguel Navas.

El grupo financiero Probursa cuenta con 144 oficinas, 4.500 empleados y unos activos totales de 545.000 millones de pesetas. Probursa nació como una casa de bolsa, con una plantilla de 500 empleados. Por las especiales condiciones de México, las agencias de bolsa no nacionalizadas fueron las que experimentaron un mayor crecimiento y posteriormente, en la privatización de entidades financieras, se hiciero con la mayor parte de los bancos.

La dimensión de Probursa cobra sentido, si nos atenemos a que es una sociedad mucho menos 'bancarizada' que la española. En México, existen 5.000 oficinas frente a las 35.000 sucursales con que cuenta el sistema financiero en España.

Probursa es un conglomerado de 12 sociedades con dos actividades bien diferenciadas: la bancaria y la intermediación bursátil. Esta última conlleva lo que en España se entendería por banca privada o administración de carteras de pariculares. Asimismo, cuenta con sociedades de seguro, 'factoring', entre otras.

60.000 MILLONES

El BBV se ha hecho en tramos con Probursa. Comenzó adquiriendo un 20% por un valor de 18.000 millones de pesetas. Tras la Junta, el BBV pondrá en marcha una ampliación de capital de 21.000 millones de pesetas, mientras que los socios mexicanos acudirán con 6.700 millones.

En un tercer paso, el BBV suscribe deuda subordinada por 180 millones de dólares (21.700 millones de pesetas) convertibles en accioes de Probursa a los cinco años. En resumen, y sin valorar el desfase temporal de los diversos tramos, el BBV habrá invertido en Probursa unos 60.000 millones de pesetas.