El contrato tiene una duración de 3,5 años, con posibilidad de prórroga por otros 1,5 años, y se enmarca en el programa de conservación y explotación de carreteras del Ministerio, que permite mantener la vialidad en la Red de Carreteras del Estado "para que sea accesible en adecuadas condiciones para todos los ciudadanos".

El contrato incluye proyectos específicos de mejora en diversos tramos de las carreteras que pasan por territorio burgalés. En total, se realizarán actuaciones sobre un total de 118,9 kilómetros, de los cuales 83,4 kilómetros son de autopista o autovía. La mayor parte –76 kilómetros– tendrán lugar en la AP-1, aunque también se trabajará sobre la A-1, y las carreteras N-1R, N-232, N-1 y N-1A.

Además, el contrato prevé también una serie de trabajos sobre varios puntos singulares, cómo los túneles de San Nicolás (AP-1), Barrio (AP-1), Hontoria (AP-1), Peña María (A-1) o Pancorbo (N-1).

Con estas operaciones de conservación y explotación en la Red de Carreteras del Estado, el Gobierno reforzará la vialidad y el buen estado de las carreteras, para permitir que la autovía y sus elementos funcionales dispongan "de las mejores condiciones" posibles.

Entre otras cosas, se añadirán elementos que mejoren la vigilancia y atención de accidentes e incidentes, la vialidad invernal, el servicio de control de túneles y comunicaciones, el mantenimiento de las instalaciones, el establecimiento de inventarios y reconocimiento del estado de la vía, la agenda de información de estado y programación, la ayuda a explotación y estudios de seguridad vial, y el mantenimiento de los elementos de la carretera con adecuados niveles de calidad.

Por último, la cartera dirigida por Óscar Puentes avanzó este contrato incorpora proyectos específicos de pequeñas obras necesarias para mejorar la funcionalidad de la vía. En concreto, se hará una rehabilitación preventiva del firme de la autopista AP-1 entre Zuñeda y Pancorbo en aquellos tramos de rampa prolongada con fuerte solicitación del tráfico pesado y que presentan deterioros de tipo superficial; así como una fresado y reposición del firme de la misma autopista entre Prádanos de Bureba y Grisaleña en aquellos tramos que presentan deterioro de tipo superficial.

Por último, se protegerán los pasos de mediana en la autopista AP-1 para permitir su utilización por los servicios de emergencia y posibilitar la ordenación provisional del tráfico en caso de incidencias graves. También se conservarán las áreas de servicio de Quintanapalla, Briviesca Desfiladero, que además se beneficiarán de una serie de ampliaciones de "ejecución obligatoria por parte del adjudicatario".