Según los datos de ejecución presupuestaria hasta julio que hizo públicos en rueda de prensa, los ingresos del Impuesto Especial que grava las gasolinas y gasóleos han crecido un 2,3%, y señaló que "se ve que el consumo se está frenando en relación a los datos de crecimiento económico".

El motivo, explicó, es que el Impuesto Especial es una cantidad fija sobre el precio final, por lo que una contracción del consumo afecta a los ingresos de Estado por este motivo.

Hasta el mes de julio, agregó, la recaudación el impuesto de hidrocarburos ascendía a 862.000 millones de pesetas, y su aumento era el más bajo de cuantos tributos especiales al consumo aplica el Gobierno, ya que los ingresos del que grava al tabaco ha crecido un 15,7%, el de matriculaciones un 7,6% y el de electricidad un 6,1%.

Ese comportamiento moderado del Impuesto de Hidrocarburos, dijo la responsable de Presupuestos, no crece ni siquiera igual que la economía, y opió que "ese impuesto no se está comportando igual que si no hubiera subido el precio de los carburantes".

Respecto al IVA de las gasolinas y gasóleos,que sí es variable, un 16% del precio final, Rodríguez dijo que no es posible decir cuanto del aumento de los ingresos derivados de este impuesto (15,2%) se debe al encarecimeinto de los carburantes.