Los trabajos efectuados hasta la fecha se han concentrado en acciones de restauración forestal y medioambiental mediante actuaciones dirigidas, en primera instancia, a defender y fijar los suelos en laderas de fuertes pendientes, la retirada de madera quemada por el incendio y la mejora de vías de acceso.

Según explica ahora el departamento que dirige Narbona, dada la elevada densidad de la masa forestal y la edad del arbolado que existía en la zona, se continúa con los trabajos de urgente e inmediata reparación de los daños ocasionados por el incendio forestal.

El objetivo es minimizar los procesos erosivos que se originan por la ausencia de vegetación; evitar la propagación de enfermedades y plagas, y estimular el rebrote de las quercíneas afectadas por el incendio mediante repoblación forestal, tratamientos selvícolas y reparación de infraestructuras forestales.

Para la valoración de las propuestas de actuaciones se ha trabajado en coordinación con la Comunidad Autónoma de Castilla- La Mancha, con el objetivo de restaurar ecológicamente las masas arbóreas existentes con anterioridad a los incendios, y conseguir la implantación y futuro desarrollo de un bosque, al menos similar al desaparecido con el fuego, señalan desde Medio Ambiente.