EL GOBIERNO CREE INNECESARIA LA REDUCCION DE LA FISCALIDAD DE LAS EMPRESAS PARA AUMENTAR SU COMPETITIVIDAD
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El Gobierno no prevé reducciones en la iscalidad que grava a las empresas como medida para mejorar su competitividad, por entender que es homologable con la comunitaria, según manifestó hoy Pedro Pérez, secretario de Estado de Economía.
Pérez hizo estas manifestaciones ante un auditorio de empresarios asistentes a unas jornadas sobre el mercaco único, que organizó hoy en la capital de España la patronal madrileña CEIM.
El secretario de Estado aseguró que las empresas españolas pagan el Impuesto de Sociedades y el IVA más bajos de la C, y que las cotizaciones efectivas a la Seguridad Social, una vez descontadas las deducciones, están al nivel medio de la Comunidad Europea.
En su opinión, la carga que representan conjuntamente los impuestos y las cuotas sociales no es uno de los factores que merman competitividad a las empresas, por lo que su reducción no es una medida "imprescindible" para mejorarla.
"No debemos confiar en que la competitividad descanse en una fiscalidad blanda porque esa no es una vía segura ni correcta a laro plazo", recalcó.
En respuesta a estas palabras de Pérez, el presidente de la CEIM, Fernando Fernández Tapias, que ejercía de moderador, se felicitó irónicamente de vivir en un "paraiso fiscal" sin haberlo sabido.
Agregó que la patronal se reserva el derecho a plantear la reducción de la fiscalidad que recae sobre las empresas en la negociación del pacto de competitividad "porque, en caso contrario, no sería un pacto, sino una imposición".
Subrayó que, según los datos de la patronal, la reaidad es muy distinta a la apuntada por Pedro Pérez y que existe el peligro de que, al liberalizarse totalmente las inversiones en la CE, una parte de las españolas se dirijan a países donde obtienen una mayor rentabilidad.
MANIPULACION
Por otra parte, Pedro Pérez insistió nuevamente en que el pacto de competitividad va más allá de la política de rentas y lamentó que su contenido y objetivos no hayan sido comprendidos nítidamente por la sociedad debido a la versión que de él han dado "algunos partido políticos y centrales sindicales".
Pérez adelantó que el Gobierno propondrá a los interlocutores sociales, para el periodo 1992-94, una subida de salarios nominales inferior a los de la CE. A su juicio, eso es compatible con un aumento del poder adquisitivo superior a la media comunitaria, gracias a la reducción que producirá en la inflación.
Subrayó que es necesario que los sindicatos "desmitifiquen" el crecimiento de los salarios monetarios y se avengan a negociar directamente el aumento del pder adquisitivo. El pacto, agregó, permitiría también un mayor crecimiento del empleo y una política fiscal menos rigurosa.
Finalmente, señaló que el Gobierno quiere llevar adelante una nueva ley de huelga, pero considera que, en este terreno, es necesario sobre todo un cambio de actitudes, de manera que el paro sea "un instrumento al que se recurre en última instancia, no en la primera".
En una conversación posterior con los periodistas, Pérez afirmó que el Gobierno esperará a ver cómo evolucion la inflación en la segunda mitad del año antes de plantearse una modificación de los tipos de interés.
(SERVIMEDIA)
01 Jul 1991
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