En la actualidad, sólo existen dos reservas marinas gestionadas por la Administración central: la de la Isla de Tabarca (Alicante), creada en 1986, y la de las Islas Columbretes (Castellón), protegidas cuatro años después.

Aunque el Plan Sectorial de Pesca para el periodo 1994-1999, que está elaborando el Gobierno, contemplaba en un principio la creación de 36 nuevas reservas marinas, fuentes del departamento dirigido por Vicente Albero aseguraron a Servimedia que esta cifra odría experimentar un ligero aumento.

La reserva marina es un figura de protección de la que se pueden beneficiar tanto áreas costeras, como las aguas interiores. El principal objetivo es apoyar la regeneración y conservación de las especies que habitan en la zona afectada.

En general, en estas áreas queda totalmente prohibida cualquier actividad pesquera o de buceo, aunque en algunos casos pueden implantarse excepciones "rigurosas".PRIMERAS DECLARACIONES

Aunque todavía no están definida cuáles serán las nuevas reservas, en 1994 podrían otorgarse la declaración a Cabo de Gata-Níjar (Almería), Murada (Ibiza), Mar de Alborán, Benidorm (Alicante), Cabo de Palos-Isla de las Hormigas (Murcia) y Cabo de San Antonio (Alicante).

La mayor parte de las reservas costeras protegerán áreas del litoral mediterráneo y serán gestionadas por la Administración central. En el caso de las aguas interiores, la gestión corresponderá a las autonomías.

Si bien este tipo de reservas no suelen ser financadas por la Unión Europea, España las incluyó en su Programa de Orientación Plurianual, por considerar que contribuye al cumplimiento de la Política Estructural Comunitaria en lo que a protección de especies de interés pesquero se refiere.

Además, con esta figura de protección el Ministerio de Agricultura asegura estar dando respuesta a las conclusiones del Convenio sobre la Diversidad Biológica que surgió de la "cumbre" de Río de Janeiro celebrada el año pasado y que España firmó.