Este acuerdo establecerá en el Mediterráneo una zona delimitada por una línea imaginaria que irá desde el Cabo de Gata hasta la frontera marítima con Francia.

Esta es la única zona del mundo donde se reproduce el atún rojo, una de las especies más amenzadas. El acuerdo ha sido consultado previamente con los distintos sectores afectados.

Según el ministerio, la explotación excesiva de los recursos pesqueros en el Mediterráneo obliga a tomar medidas para evitar en un futuro próximo el agotamiento de las poblaciones de peces, especialmente en el caso del atún rojo, al estar gravemente amenazado de desaparición.