En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, subrayó que se trata de una cita con "la mayor institución europea" elegida por sufragio directo.

Los 785 eurodiputados, de los cuales 50 serán españoles, son "la máxima expresión" de lo alcanzado en el proyecto europeo, algo que, aseguró, nadie podría haber imaginado hace cincuenta años.

El Parlamento Europeo renovado representará a más de 490 millones de ciudadanos, y aunque para España son sus quintas elecciones europeas, la vicepresidenta afirmó que en esta ocasión revisten una "especial importancia".

El reto, argumentó, es dar forma a la Europa dibujada por el Tratado de Lisboa, con más voz y más liderazgo internacional, más abierta, más de los ciudadanos y capaz de responder de forma "unida, responsable y solidaria" a los actuales tiempos de profunda transformación.

Fernández de la Vega subrayó la "feliz coincidencia" de que estas elecciones se convoquen el día en el que España conmemora sus primeras elecciones municipales en democracia, y que además el Parlamento Europeo celebre este año su trigésimo aniversario, símbolos ambos de que "nuestros destinos están más unidos que nunca".