Así lo dijo la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, al ser preguntada en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros. "Espero que sea así", dijo.

Fernández de la Vega subrayó que el proceso está ya "en su recta final" después de un "muy buen trabajo" de la ponencia que debe seguir ahora en la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados pero con plazo previsible mucho más corto.

De hecho, el calendario barajado por esa comisión es que el dictamen sobre la reforma y el texto definitivo puedan ser aprobados por el pleno del Congreso de los Diputados a finales de este mes.

De acuerdo con ese calendario, dijo Fernández de la Vega, "hay posibilidades razonables" de que el referendum pueda ser antes del verano. Precisó, no obstante, que el Gobierno respetará los plazos que fije el Parlamento.

La vicepresidenta reiteró que las guías de todo el proceso han sido la Constitución y el respeto al interés general. "Se ha hecho lo más difícil" en la ponencia y se demuestra que, como dijo el Gobierno desde un principio, "habrá Estatuto, y un buen Estatuto".

Lo mismo ocurrirá, insistió, con las demás comunidades autónomas que aprueben propuestas de reforma de su estatuto de autonomía, porque ése es el compromiso del Gobierno con la actualización del modelo territorial.