EL GOBIERNO DE CHAVES ESTABLECE EL CONTROL DE HORARIOS MEDIANTE LA HUELLA DIGITAL
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La Consejería de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía, que preside el socialista Manuel Chaves, ha decidido imponer a sus trabajadores un nuevo modelo de control de horarios basado en la huella digital, para lo que ha obtenido el visto bueno de la Agencia de Protección de Datos (APD).
Así consta en una comunicación oficial de la citada Consejería, a la tuvo acceso Servimedia, que anuncia la "Implantación de un nuevo sistema de control de jornada y hrario", que entrará en vigor en septiembre después de que, a partir del próximo 15 de agosto, los servicios informáticos de la Junta fotografíen y creen un fichero con la huella de un dedo de cada una de las manos de sus funcionarios.
Este sistema se aplicará, en principio, a los 800 trabajadores de los Servicios Centrales de la Consejería de Obras Públicas y Transportes, entre los que hay oposición a la nueva medida por considerar que "atenta contra su intimidad", según dijeron a esta agencia algunosde los afectados.
El escrito de la Consejería de Obras Públicas y Transportes, que tiene fecha de 25 de julio pasado y está firmado por el Secretario General Técnico, establece que "se va a proceder a la implantación de un nuevo sistema de identificación biométrica para el control de la jornada y horario", que sirva para "erradicar las disfuncionalidades" del anterior modelo de tarjeta personal y número de identificación.
La Consejería asegura que, para poner en marcha este modelo, es imprescindile que todos los trabajadores se presten durante 20 ó 30 segundos a que los servicios técnicos les fotografíen dos dedos, para lo que piden la máxima colaboración. De lo contrario, advierte de que la negativa a cooperar con esta iniciativa "podrá ser calificada como falta disciplinaria grave".
El documento considera como "un hito" la puesta en marcha en septiembre del nuevo sistema de "identificación biométrica digital", que supondrá que, cada vez que se entre o salga de las dependencias, el funcionaro deberá teclear un número y poner su dedo sobre un escáner que le identifica.
Todo movimiento de los trabajadores quedará así reflejado, según el escrito, "a través del tecleo en las nuevas terminales (...) del número asignado a cada trabajador, seguido de la aplicación de su dedo en el espacio habilitado para el reconocimiento en las citadas terminales, en la forma que se mostrará por el personal encargado de las tomas de datos biométricos".
Finalmente, los responsables de la Consejeria confíanen que el nuevo sistema se convierta en "el adecuado mecanismo que permita y anime a la responsabilización personal del uso del tiempo de trabajo mediante el propio control y administración del horario".
FINALIDAD LEGITIMA
Para poner en marcha esta medida, la Junta de Andalucía ha tenido que solicitar el visto bueno de la Agencia de Protección de Datos, puesto que se trata de crear un fichero informático con datos de trabajadores que, además, podría cederse y formar parte, según la propia consejería al Sistema Unificado de Recursos Humanos de la Junta de Andalucía (SIRHUS).
Examinada la solicitud de la Junta, la Agencia ha remitido un escrito de tres folios, al que tuvo acceso Servimedia, en el que autoriza la toma de las huellas digitales, siempre que se cumplan las medidas de control de este tipo de registros y sean "adecuados, pertinentes y no excesivos en relación con el ámbito y las finalidades legítimas para que se hayan obtenido".
Según la APD, la huella digital garantiza la "imposibe" coincidencia entre dos individuos y su uso como sistema de control "no puede considerarse de mayor trascendencia que los relativos a un número de uso personal, a una ficha que sólo pueda utilizar una personas o a la combinación de ambos".
La Agencia insiste en que, dado que la Junta trata de asegurarse "el debido cumplimiento de obligaciones derivadas de la relación laboral o administrativa", no se necesita ni siquiera el consentimiento de los trabajadores.
"Debe entenderse adecuado que la proia Administración recabe los datos que sean precisos para el normal desenvolvimiento de la misma (relación laboral) y, dentro de estos datos, parece adecuado se recaben de aquéllos (los funcionarios) los correspondientes a su identidad a efectos de garantizar las medidas de seguridad que se consideren oportunas por parte de la Administración, y que la propia Administración pueda comprobar el grado de cumplimiento de las obligaciones que competen a los funcionarios", continúa Protección de Datos.
Finalente, el escrito exige a la Junta que el fichero que se cree con los datos de los funcionarios se ajuste a la normativa sobre protección de datos y se adopten las medidas "de conservación y seguridad" que correponden, no pudiendo, sin consentimiento del interesado, ceder los datos a terceros.
"CONEJILLOS DE INDIAS"
Por su parte, algunos trabadores consultados por Servimedia mostraron su protesta por la medida impuesta por la Junta de Andalucía y dijeron sentirse como "conejillos de indias".
Segn explicaron, las únicas explicaciones que les han dado es que el actual sistema es "lento y antiguo", lo que impide realizar el cómputo de las horas trabajadas por cada funcionario.
"Nos han dicho que quieren un control exhaustivo y pormenorizado de todo y de todos", se quejaron, antes de anunciar que han pedido a los sindicatos que impugnen esta decisión de la Junta de Andalucía.
Además, lamentaron que "el carácter policial que siempre ha tenido la huella digital llegue ahora incluso al ámbito aboral", y alertaron del peligro de que las bases de datos que se creen puedan caer en "manos de cualquiera", lo que supondría, a su juicio, que alguna persona pudiera falsificar con total facilidad carnés de identidad y, además, contar con datos económicos, de horarios, de vacaciones y de otros asuntos personales.
(SERVIMEDIA)
04 Ago 2002
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