Para llevar a cabo el plan, la Consejería de Sanidad y Bienestar Social desarrollará un gran número de actividades dirigidas a los distintos grupos de riesgo definidos, teniendo en cuenta la edad y el tipo de accidentes que sufren con más frecuencia.

A la población infantil, con más riesgo de sufrir caídas, lesiones con objetos cortantes, accidentes eléctricos y escolares, van dirigidas distintas actividades en los centros educativos dentro del Pograma de Educación para la Salud, que incluyen la información a las asociaciones de padres de alumnos, la formación de docentes o la publicación de material informativo y didáctico sobre prevención de accidentes.

Los adultos, que principalmente sufren accidentes laborales y de tráfico, contarán con documentación e información sobre las medidas de seguridad frente a dichos accidentes.

Las medidas destinadas a la tercera edad se llevarán a cabo fundamentalmente a través de hogares, clubes, residenias y otras asociaciones, donde se distribuirá material didáctico al personal sanitario, a los trabajadores sociales y a los propios ancianos.

En la Comunidad Autónoma de Castilla y León los accidentes ocupan el quinto lugar entre las causas de mortalidad, por detrás de las enfermedades cardiovasculares, de los tumores y enfermedades respiratorias, y compartiendo puesto con las enfermedades digestivas, lo que supone entre un 5 y un 6 por ciento de todas las causas de muerte.