Castilla y León tiene una tasa de mortalidad de 22,2 por cada 100.000 habitantes. Entre 1975 y 1985 la tasa de mujeres que fallecieron por tumor maligno de mama pasó del 17,49 al 22,21, proporción que supera la de todos los países de Europa, con excepción d Inglaterra, que en 1982 -última cifra conocida- tenía un 28,20 por 100.000.

La base del programa que pondrá en marcha el Gobierno castellano-leonés pretende detectar en la población aparentemente sana cánceres de mama desconocidos para la mujer que estén todavía en estado precoz.

El Ejecutivo regional pretende disminuir la mortalidad por cáncer de mama en un 20 por ciento en diez años, mediante la reducción de la ingestión de proteínas y grasas de origen animal e incrementanto el consumo de frut, verdura y legumbres.

Entre otras medidas para disminuir el riesgo, la Junta quiere fomentar entre las mujeres adultas la conveniencia de que el primer embarazo sea antes de los 30 años.

Además, el Gobierno autonómico adoptará medidas de educación para la salud, informando a las mujeres con edades superiores a los 25 sobre los factores de riesgo y las medidas de prevención. Asimismo, en los próximos cinco años pondrá en marcha un plan de formación del personal sanitario, que abarcará la prevencin etiológica y el tratamiento del cáncer de mama.

El programa incluye también el acceso a servicios de técnicas de diagnóstico precoz del cáncer de mama y la puesta en marcha inmediata de un registro de mortalidad por este tipo de cáncer.