Si hasta ahora los padres británicos no tenían derecho a una baja por paternidad remunerada, la nueva medida les dará derecho a quince días libres, cobrando 16.000 pesetas por semana, que corresponderían a la baja mínima por maternidad. Los planes previstos recogen también el derecho de los padres a ausetarse del trabajo en caso de que alguno de sus hijos tenga una cita médica.

Las madres podrán también contar con un horario más flexible para atender sus obligaciones familiares, con la posibilidad de incrementar el tiempo de la baja maternal o de trabajar media jornada. Sin embargo, los sindicatos han alertado sobre la posibilidad de que las mujeres sin hijos se vean obligadas a cubrir horas extras, lo que provocaría tensiones en el trabajo.

Otra de las ideas que incluye el proyecto ministerial s la dotación de los mismos beneficios por maternidad a las estudiantes de Enfermería, que hasta el momento no tenían derecho a reclamar una paga al dejar sus labores hospitalarias, incluso si trabajaban a jornada completa y recibían un salario fijo.