El Supremo considera que, aunque la causa del accidente de tráfico fue que el conductor fallecido realizó un adelantamiento imprudente, lo cierto es que el motorista perdió la vida al gopeare con un poste de hierro abandonado por la Comunidad Autónoma de Baleares al retierar el quitamiedos.

"De haberse cumplido por la Comunidad Autónoma con la obligación de mantener las inmediaciones del arcén en las debidas condiciones de seguridad, retirando elementos peligrosos e innecesarios, como eran los postes de sujeción de quitamiedos, una vez eliminado éste, tampoco se habría producido el resultado de muerte", dicen los magistrados. "El accidente originado hbuiera tenido unas consecuencias más eves".

Para el Tribunal Supremo, la administración de la comunidad autónoma es reponsable de la muerte del motorista, puesto que los servicios públicos de mantenimiento de la carretera no retiraron "un elemento de riesgo cuya presencia injustificada lo exigía". Los magistrados insisten en que la Administración balear incumplió su deber de preservar en condiciones de seguridad un bien de dominio y uso público.

De esta forma, el Alto Tribunal confirma la sentencia dictada en su día por el Tribunal uperior de Justicia de Baleares, que condenó a la Administración autonómica a indemnizar con 8 millones de pesetas, en concepto de daños y perjuicios, a la viuda del motorista y a sus dos hijos, menores de edad cuando falleció su padre.