Así lo trasladó tras el Consejo de Gobierno celebrado en la Casa de Correos, después de que el martes desde el PSOE pidieran al PP “respeto” tanto por el proceso de investidura como por la celebración de la Fiesta Nacional ante los previsibles pitidos en el desfile militar del próximo jueves.

“Acudiremos con ánimo festivo a festejar la Fiesta Nacional”, indicó García en referencia al Ejecutivo madrileño, “tal y como hemos hecho otros años durante los actos de la Hispanidad”. También defendió que la contestación que pueda haber en la calle durante ese día “no depende de un partido político ni en este caso del Gobierno de la Comunidad de Madrid”.

Añadió que “lógicamente los pronunciamientos de los ciudadanos en la calle son libres y ajenos a cualquier partido político”. Estas declaraciones se producen tras la afirmación de la ministra de Política Territorial en funciones y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, quien denunció el martes tras el Consejo de Ministros que “cada vez que en este país no gobierna el PP la Fiesta Nacional deja de ser la fiesta de todos para ser la fiesta del insulto”.

Con esas palabras vino a reconocer que el Ejecutivo espera una pitada, como la de años anteriores, por lo que reivindicó “respeto a la Fiesta Nacional, que es la fiesta de todos los españoles”, e insistió en que “en ese ámbito, en el del respeto, todos saldríamos ganando, también el Partido Popular, que ha debido de escuchar ya que esa, la estrategia de la confrontación, no le lleva a ningún camino”.