Esta comisión, integrada dentro de la Ordenación del Territorio, tiene que emitir un informe favorable para la realización de cualquier obra que pueda alterar el entorno del centro histórico de la capital turolense. En el resto de localidades turolenses donde la ONCE ha instalado cabinas, como Cella, Alcañiz, Andorra o Utrillas, no ha habido ningún problema.

Según el delegado provincial de la NCE, Alicio Palomar, las solicitudes se entregaron al Ayuntamiento, que en todo momento ha mostrado su predisposición para facilitar la instalación, "sin embargo la comisión todavía no ha dicho nada sobre ninguna de las cabinas, porque nosotros no esperamos que se concedan todas, pero sí alguna de las solicitadas".

En la capital turolense hay catorce vendedores de cupones y solamente existen dos cabinas, "el resto tiene que trabajar a la intemperie". En las localidades pequeñas , donde sólo hay un venedor, éstos son siempre ambulantes, "porque si no, no venden todos los cupones", ha señalado Alicio Palomar.

Por otra parte, el consejero general de la ONCE en Aragón, Francisco Galarreta, viajó este fin de semana a Teruel acompañado por la presidenta del Consejo Territorial de la ONCE en Aragón, Teresa Lahoz, para presentar el nuevo lector de cupones con el fin de evitar engaños.

Francisco Galarreta explicó que la organización firma convenios con los ayuntamientos para trabajar en la eliminaciónde las barreras arquitectónicas para los ciegos en las ciudades, tanto en las construcciones ya existentes como en las nuevas.

En Teruel no existe ningún tipo de convenio, "a pesar de que es una ciudad que, por sus características (subidas, escaleras, aceras estrechas...), es bastante incómoda para los invidentes".