El Real Decreto modifica otra anterior e itroduce como novedad la ampliación del ámbito de aplicación, al incluir los agentes mutágenos, que son sustancias y preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea, pueden producir efectos genéticos hereditarios y aumentar el riesgo de enfermedad.

La nueva norma regula las disposiciones mínimas aplicables a las actividades en las que los trabajadores estén o puedan estar expuestos a agentes cancerígenos o mutágenos como consecuencia de su actividad laboral e incluye disposiciones especíicas relativas a la protección sanitaria contra las radiaciones ionizantes.

De esta forma, se incorpora al Derecho español la Directiva Europea relativa a la protección frente a los agentes mutágenos y se adecúa la legislación española de prevención de riesgos laborales a la normativa comunitaria.