Así lo anunció la portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Ejecutivo que dio el visto bueno a estas operaciones.

Según detalló Rodríguez, el grupo turístico percibirá 38 millones, mientras que Mediterránea Catering recibirá otros 28 millones.

La portavoz gubernamental destacó que gracias a estas dos ayudas se protegerán unos 10.000 empleos, que son los que agrupan las plantillas de estas compañías de servicios.

Juliá tiene 85 años de historia y registró una facturación de 343 millones de euros en 2019. Cuenta con más de 12 millones de clientes en 40 ciudades, una flota de 450 vehículos en 4 continentes y 1.600 empleados.

Por su parte, grupo Mediterránea es una compañía multinacional, con más de 30 años de experiencia en el sector de la restauración y con una facturación superior a los 220 millones de euros. Grupo El Antiguo Convento de Boadilla, Aliment Art y Mediterránea Internacional son empresas de Mediterránea. Actualmente suma más de 8.000 empleados en más de 800 centros de trabajo en España y Latinoamérica.