Entre otros objetivos, esta normativa pretende reformar la enseñanza castrense, lo que permitirá a los militares obtener en sus academias la formación para obtener un título del sistema educativo general, que será universitario en el caso de los oficiales.

La formación para el ingreso en las Fuerzas Armadas, además de la preparación militar necesaria para el desempeño de sus misiones, comprenderá la formación que posibilitará la obtención de un título del sistema educativo general.

El nivel de dicho título estará en función de la escala en la que se pretenda ingresar. Para la Escala de Oficiales, el título será universitario de grado; para la de Suboficiales, de Formación Profesional de grado superior, y para la de Tropa y Marinería, de Formación Profesional de grado medio.

La ley mantiene la Escala de Suboficiales, crea una nueva Escala de Tropa y Marinería y simplifica y racionaliza el sistema de ascensos, homogeneizando los criterios que se deben emplear en las distintas escalas.

Para el primer ascenso, el sistema será el de antigüedad. Para el último ascenso de cada escala, y en el caso de la de Oficiales para los ascensos al empleo de coronel además de los ascensos a oficial general, el sistema será el de elección (libre designación de los que se consideren más idóneos).

La ley establece un número máximo de militares profesionales y faculta al Consejo de Ministros para la aprobación de plantillas plurianuales de las escalas de Oficiales y Suboficiales, y al ministro de Defensa para la aprobación de plantillas bienales para la Escala de Tropa y Marinería.

Se reduce el número total de efectivos, que pasará a situarse entre 130.000 y 140.000 (actualmente el número total está entre 150.000 y 168.000). También regula el número total de oficiales y suboficiales, que pasa a ser de 50.000 (ahora 48.000), si bien aumenta el número de suboficiales y disminuye el de oficiales.

Se reduce el número de oficiales generales, que pasa a ser de 200, sin contar los destinados en el extranjero y en la Casa del Rey, que no tienen limitación en cuanto a número y que actualmente son entre los dos casos unos 25 (en la ley vigente el número máximo es de 265).

Igualmente, se reduce el número de coroneles, que pasa a ser de 1.050 (ahora 1.235), y también desciende el número de militares de tropa y marinería, que pasan a ser entre 80.000 y 90.000 (ahora entre 102.000 y 120.000).