Así lo trasladó la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que señaló que, entre los objetivos prioritarios del Perte se encuentran “redimensionar” el tamaño de las empresas de la economía social y su internacionalización. “Necesitamos no solo ser capaces de redimensionarlas, sino de internacionalizarlas”, insistió.

Además, Díaz recordó que la economía social supone en España un 10% del Producto Interior Bruto (PIB), emplea a más de 2,2 millones de trabajadores y engloba a más de 43.000 empresas, en su mayoría cooperativas y también empresas de inserción, cofradías de pescadores “y muchas formas jurídicas” que “hacen país, lo vertebran y anclan población en los territorios rurales”, según explicó la vicepresidenta segunda.

Por ello, incidió en que se pretende “convertir a España en un polo de referencia” a nivel europeo y mundial en materia de economía social, aunque indicó que con este Perte se va a abordar también “la revolución social pendiente” que es la “revolución de los cuidados”.

Para ello, adelantó que se va a trabajar en la digitalización de los servicios sociales, así como en fórmulas de viviendas colaborativas y cuidados en el domicilio para las personas mayores en situación de dependencia que desean seguir viviendo en el domicilio.

Asimismo, Díaz sostuvo que “es un Perte único” en Europa y que “tiene las características del Gobierno”, ya que es un Ejecutivo “solidario, feminista, sostenible, que incluye y que está trabajando frente al ruido para mejorar la vida de la gente”.

De hecho, la titular de trabajo y Economía Social destacó que el Gobierno continúa “con esa transformación silenciosa de nuestro país mientras la oposición sigue volcada en la carencia de propuestas” y en “hacer mucho ruido”.