El 4 de mayo de 1956, España se adhirió al Comité Intergubernamental de las Migraciones Europeas, en 1966 se ratificó dicha adhesión y se creó la Oficina del Comité en Madrid. En 1977 España se retiró como país miembro a ser observador.

En 1999 se renovó y pasó a ser el interés de España por la Organización Internacional para las Migraciones, Organismo Internacional resultante de la evolución del Comité Intergubernamental de las Migraciones Europeas, donde seguía siendo país observador.

Ello dio lugar al inicio del proceso de reingreso como país miembro en este Organismo, proceso que culminó en junio de 2006 cuando el Congreso de los Diputados autoriza el reingreso de España en la Organización.

Durante el tiempo que España fue país miembro del Comité, este organismo mantuvo una Oficina de Enlace en Madrid con el consentimiento de las autoridades españolas.

Mediante una comunicación del Ministerio de Asuntos Exteriores, se concedió en 1965 a la misma un "estatuto jurídico", que no equivale a un Acuerdo de Sede ya que se otorgaba mediante un acto unilateral por parte de España, esencialmente revocable.

Con objeto de superar esta situación y proporcionar la seguridad jurídica necesaria a la Oficina de la Organización Internacional para las Migraciones en Madrid, el Gobierno ha estimado necesario concluir un acuerdo de sede con carácter normativo.