Fuentes socialistas y de La Moncloa consultadas por Servimedia coinciden en apuntar que tras “tanta expectativa” se ha “desinflado el efecto Feijóo” al ver al expresidente gallego “nervioso” y “patinando” con los datos económicos.

Precisamente, al término del enfrentamiento dialectico, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, recomendó en tono irónico a Feijóo mejores asesores para evitar errores como los que, aseguró, cometió en la intervención.

“Feijóo ha confundido los tipos de interés con la prima de riesgo, lo cual, en mi opinión, pone de relieve que tiene que rodearse de mejores asesores en el ámbito económico”, consideró Calviño, después de que el expresidente gallego dijera que con la subasta de hoy los españoles “ya estamos pagando la prima de riesgo a 250 puntos, la prima de riesgo más alta desde verano de 2014”.

También lo hizo la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, quién vio a un Feijóo “carente de ideas”; y la titular de Hacienda, María Jesús Montero, lamentó que Feijóo haga uso “no solo de adjetivos gruesos” sino también de “mentiras”, al decir durante su intervención ante Sánchez que la prima de riesgo está en 250 cuando, recordó la ministra, está a menos de la mitad, al situarse en el entorno de los 111 puntos.

Estas declaraciones sirvieron al PP para, decían fuentes de la dirección, trasladar la sensación de que en su “debut” Feijóo había vencido dialécticamente al presidente, hasta el punto de que tres miembros del Gobierno -dos vicepresidentas y una ministra- salieron después para apuntalar la idea de Sánchez.

En los pasillos del Senado, en las filas socialistas, el comentario generalizado era sobre la expectación generada y sobre que en realidad en su intervención el líder del PP había sido “previsible” y repetitivo, sin ninguna sorpresa.

Mientras, la bancada popular celebraba que Feijoo había fijado muy bien la posición del partido y contrapuesto el modelo de gestión y economía del PP frente al modelo que defiende Sánchez.

Los populares insisten en que se han bajado los decibelios en el debate, pero lamentan que no han cumplido su objetivo de llevar a Sánchez a la moderación, pese a que, insisten dichas fuentes, era lo que le debería de interesar como presidente. “Ha perdido una oportunidad”, apostillan en el PP, mientras en el PSOE se remarca el “tono respetuoso” de Sánchez frente a un PP que ha seguido con “su marca de la casa” y no se ha dirigido ni una sola vez como “presidente” al jefe del Ejecutivo.

Desde La Moncloa sostienen que a Feijóo no le deben quedar muchas ganas de volver porque se le ha visto “nervioso” y con “errores graves en los datos”. “No ha habido adversario”, ni “color en el control y la dialéctica parlamentaria”.

Además, añaden, no ha contestado “todavía” a las propuestas de pacto que se le trasladó hace tres meses en la primera reunión de ambos en La Moncloa tras la elección de Feijóo como líder popular.

Pasado ya el primer debate parlamentario entre Sánchez y Feijóo, en La Moncloa remarcan la posición del líder popular, que sólo tiene “una vez al mes” para medirse con el presidente y reivindicar su alternativa.