En esta caseta se encerrarán todos los empleados de la factoría al término de sus hbituales turnos de trabajo. Según los miembros del comité, los directivos de la empresa les han negado el suministro de agua y de electricidad la caseta.

Los 240 trabajadores anunciaron que endurecerán sus movilizaciones con protestas mucho más contundentes a partir del próximo lunes, cuando concluyan las vacaciones de Semana Santa.

Los empleados se oponen totalmente al cierre de la fábrica anunciado por la dirección de la multinacional norteamericana, que pretende trasladar su producción a un pas de Europa del Este, donde la mano de obra es mucho más barata.

Como muestra de gratitud al apoyo que están recibiendo por parte de vecinos e instituciones, los empleados de la planta de Gillette en Sevilla tienen previsto realizar una donación de sangre.

Los representantes del comité de empresa tenían previsto mantener una reunión hoy con la dirección de la empresa, encuentro que se ha pospuesto hasta el próximo 6 de abril a petición de los directivos de Gillette. El comité de empresa pretende resentar a la dirección un plan de viabilidad con algunos cambios laborales que consigan el mantenimiento de la factoría.