Al llegar a la Audiencia Nacional, donde estaba prevista la intervención del fiscal del "caso Atlético" para revocar las cuestiones previas planteadas por las defensas, Gil dijo, en su habitual estilo insultante, que "vengo a escuchar el sermón del Monte de los Olivos", en clara alusión a la exposición de Castresana.

Tras la sesión de la vista oral, el presidente del Atlético señaló que "esto es el atentado mayor contra el Estado de erecho". "Pero no por mí", continuó, "es que mañana os toca a vosotros", dijo a los informadores.

Por otra parte, Gil saludó efusivamente al juez Baltasar Garzón, de quien apuntó que es un magistrado "cojonudo que procesa e imputa a quien entiende que debe procesar e imputar, no al que le diga Villarejo (el fiscal jefe Anticorrupción)".