En el pleno de la noche del 7 de agosto de 1998, el equipo de gobierno de Gil aprobó, de forma unilateral, el PGOU que había sido suspendido por la Comisión Provincial de Urbanismo.

Tras un año de lucha con la Junta de Adalucía, el alcalde de Marbella aprobó el pasado martes la revisión del PGOU -con los votos en contra de la oposición-, que mantiene como urbanizables 4,5 millones de metros cuadrados, de los casi 11 de terreno forestal que habían sido denegados por la Comisión Provincial de Urbanismo.

Ante la postura de la Junta de Andalucía, Gil señaló hoy, en un comunicado de prensa, que el presidente del Ejecutivo autonómico, Manuel Chaves, "podrá comprobar, y no tendrá empacho en decir, que lo que hemos presentad está dentro de la ley y que nadie pretende saltarse a la torera nada".

El alcalde de Marbella advierte a Chaves de que "tendrá que cargar las pilas para las próximas elecciones a la Junta, donde deberá sacar toda la artillería pesada para firmar más pactos anti-Gil o anti-diablo, anti-mafia, anti-corrupción o anti-todoloquesemueva".